lunes, 28 de septiembre de 2009


Ahora ya no entiendo nada...
ya no sé que puertas puedo abrir y cuales debo cerrar...
aquellas que cierro son puñalada tras puñalada...
mi corazón... mi corazón deja de respirar...
no quiere seguir por que... por que...
...
"Perdóname"
...
Susurrame al oído
...
Tu mano es como mi "salvavidas".... Gracias ...

3 comentarios:

  1. Cuando tu corazón te dicta el camio no tiees que tener miedo. ¿Ves? salvada por la mano del amado.

    Un abrazo, me gusta tu blog.

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  2. Puertas que se cierran, para que otras nuevas se abran... la vida es un constante parto. Y, de él renacemos como el Fenix, es la sabiduría del sufrimiento la que nos impulsa a seguir batiendo nuestras alas... Haz caso a tu corazón, siempre.

    Y, yo te doy las gracias por pasarte por mi blog y dejar en él tu huella... Sí es cierto, en cada banco de este mundo hay un Gabriel, tod@s tenemos un poco de él.

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  3. No resulta fácil hablar con el corazón porque este no tiene voz pero si podemos seguir sus dictados porque nunca miente, la mente puede engañarnos.

    Puertas y mas puertas, algunas nos son cerradas y otras las cerramos nosotras ¿porque? quizás por no hallar u obtener todo lo que ansiamos.

    Sonrie y vive aunque por dentro llores lagrimas de sangre.

    Mil biquiños meigos.

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